Como siempre, uno sigue con estas incompatibilidades con las nuevas tecnologías y busca las rutas por blogs y google-maps, sin saber usar todavía el GPS que lleva incorporado el "smartphone". Así que memorizando un poco la ruta e imprimiéndola en un papel, me lancé a la aventura.
Se trataba de un caluroso viernes de agosto en el que toda mi familia disfrutaba de un fantástico día de playa en Cala Sant Vicens.
Cuando salí del trabajo, me dirigí a la cala provisto de ropa de baño y como siempre ropa de running también.
A las 18:00 hs comencé la aventura y a los pocos minutos ya había tomado el camino equivocado y la ruta equivocada ja ja. A pesar de ello, una vez superada una muy espesa "garriga" divisé la Talaia y seguí mi camino, sin camino; claro está.
La subida a la Talaia resultó ser mucho más dura de lo esperado, los caminos que divisé en el google-maps ¡no eran tales caminos! así que a subir por donde uno puedaaaaaa.
Por suerte, al rato encontré unas "fites" y marcas de pintura que me indicaron la ruta a seguir para la dura subida.
Ni que decir tiene que el sufrimiento fue impresionante, pues un "bandarra" sale a la aventura, en solitario, con escasa preparación y sin agua.
Al final llegué arriba y divisé unas panorámicas impresionantessssssssssssss
La bajada fue igual de complicada que la subida,con la particularidad que me volví a perder dentro de un torrente y espesa "garriga". Divisé unos cables de electricidad o teléfono y me puse a seguirlos hasta encontrar casas y civilización ja ja.
Fotos de esta salida: AQUI
Después de tanta peripecia si he aprendido algo, que un servidor NO volverá a hacer el loco en solitario sin la debida preparación.
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